jueves, 8 de enero de 2015

EL ENIGMÁTICO "CANAL DE PARTO" DE LAS ALMAS DEL CUADRO DEL GRECO


Hola a todos y tod@s!!!
Ya iba tocando un post, y es que parece que estás fiestas navideñas nunca acaban. Eso sí, los que tenemos niños, echamos de menos a los profes, de verdad que sí, jejeje.
Mañana seguro que media España y parte de los que me seguís desde el extranjero estaremos a régimen (en donde yo me incluyo), pero hoy es hoy, y toca aún el momento de la peladilla.
Rebuscando entre mis archivos y otros documentos que guardo sobre viajes y cosas curiosas, me encuentro, aunque más que encontrarme, me doy de bruces, con una copia pequeña, tamaño libro del "El entierro del Conde Orgaz" ( realizado en 1578) , que compré hace unos años en Toledo, cuando fuí a visitar la ciudad y  el famoso cuadro y que tras rescatarla del olvido, he vuelto a examinarla de nuevo, percatándome de nuevo, de la sensación que me produjo la primera vez que lo ví. Un cuadro extraño. Barroco. Oscuro, tenebroso, cargado hasta la saciedad de figuras (a la Virgen no se le aprecian las piernas ni los pies bajo la falda, supongo que la pintaría con las piernas ladeadas por falta de espacio en el lienzo, sino es que le darían en la cabeza al ángel sito bajo ésta), vamos "que habiendo hueco hay alegría" como diría el genial humorista José Mota.
Pero ¿Quién fué el Conde de Orgaz? Un noble del siglo XIV, que dejó dispuestas unas peticiones en sus últimas voluntades a las que se negaron los ciudadanos de la Villa de Orgaz, así que fueron a juicio y debieron cumplir dichas peticiones. Después de esto, ocurrió un supuesto milagro que fue reconocido en 1583, el párroco  D. Andrés encargó un lienzo para dar testimonio de lo ocurrido en la recién remodelada capilla del Señor de Orgaz. Por supuesto contrató al mejor pintor que había en la ciudad: Doménico Teotopópuli, alias "El Greco".
El milagro, según narra una antigua tradición Toledana, tiene lugar cuando en 1327 se decide trasladar los restos de éste del convento de los frailes agustinos, a la Parroquia de Santo Tomé, y se empieza a decir que habían participado en la deposición del cuerpo en el sepulcro, san Agustín, y San Esteban, mientras que los asistentes oían una voz que decía: "Tal galardón recibe quien a Dios y  a sus santos sirve".
Nunca sabremos si tal milagro ocurrió, pero el cuadro ya es una maravilla en sí, tal vez un milagro, oscuro, sí, pero un milagro.
Pero analicemos la obra un poco más de cerca y veamos si tiene elementos misteriosos que son lo que nos interesa.

1.- El cuadro representa las dos dimensiones de la existencia humana: abajo la muerte, presidida por el cadáver del Señor de Orgaz, que va a ser depositado en su sepulcro. Arriba el cielo, la vida eterna, iluminado por Jesucristo. El lazo de unión entre una dimensión y otra es el alma inmortal del fallecido que se encuentra en pleno tránsito representada por un feto, que ayudado por un ángel, asciende al cielo, a esa otra dimensión. La muerte, por tanto se representa como "una especie de canal de parto", como un alumbramiento a la luz eterna en donde se es recibido por María y también en la que viven los santos. Un trance doloroso, pero a la misma vez esperanzador.
¿extraño no? el alma que vuelve a  nacer a la otra vida. Pero ¿y si le damos otra vuelta de tuerca? Por este mismo planteamiento que plasma el pintor, a la inversa, el alma "regresa de nuevo a la tierra por ese canal de parto" volviendo  a encarnarse en otro cuerpo y así sucesivamente. Luego podríamos pensar que en esta obra el pintor  también pudo dejar la posibilidad de la "RE-ENCARNACIÓN" según la interpretación personal y subjetiva que cada uno haga de la misma.

2.-El juego del niño, que supuestamente es el hijo del Greco (sólo su padre y él miran de frente) (el niño también está cetrino, de tez enfermiza, como el monje) en este caso, es reparar sobre la flor de la dalmática de San Esteban y señalárnosla, ¿porqué?. Aunque en realidad, a lo mejor, simplemente lo que hace es mostrarnos al personaje central del cuadro, al finado, o a lo mejor con una mano en la antorcha y la otra a esta figura dorada, quiere decir aquello, de "al césar lo del césar y a Dios lo de Dios", en fin que lo material, a lo material, y lo divino a lo divino.

3.-¿QUIÉN ES EL MONJE QUE APARECE JUNTO AL FALLECIDO? 
Este es el misterio principal. Aparece una linea imaginaria divisoria que hay entre todos los testigos del entierro y los sacerdotes que presiden el oficio, situando unos delante y otros detrás de esta linea. Un sacerdote que no es el que está oficiando la misa se muestra despaldas, el que la oficia lleva una biblia en las manos, y también en este lado de la linea tenemos a un fraile Franciscano de hábitos grises y "encapuchado" (como esas apariciones de monjes encapuchados que nadie sabe que son), que muestra un semblante hechindo, gris, cetrino, del mismo tono que sus hábitos y del mismo tono que el rostro del finado.
El pintor le ha dedicado toda la atención situándolo en primera fila del lienzo y además en relieve. ¿Podría tratarse de una aparición?¿Podría haber sido algún monje fallecido que se manifiesta en el mundo de los vivos? ¿Porqué si el alma ya ha marchado a buen puerto y se haya segura?¿ Esta figura estaría ayudando al fallecido también de alguna manera a realizar el tránsito?....¿Sería un AUTÓMATA, tan famosos en aquella época?.
¿autómatas en la obra? (blog: maestrazgotemplario)
Aparecen otros frailes de otras órdenes, como un Agustino, un Dominico o Trinitario..etc, algunos con capucha y con túnicas negras como se puede apreciar en el lienzo, pero todos están situados detrás de la linea antes mencionada. ¿Porqué este está junto al difunto?..

Otros misterios del cuadro podrían ser los siguientes:
  • Felipe II  aparece en esta obra , junto a los Santos en el cielo,   a pesar de que no había fallecido aún.¿Porqué? el pintor ha querido mostrar con esto un resentimiento hacia el monarca que lo había desdeñado. (Esto también lo hacemos los escritores: matamos literariamente a alguien, por los motivos que sea; en mi última novela, los dos personajes femeninos antagonistas, dos malas malísimas, son dos personas reales, de mi vida diaria, de las que me he inspirado, y a las que no les he guardado un final nada romántico, sino más bien fatal).
  • El Greco también pinta al señor de Orgaz con armadura lujosa, no humildemente envuelto en una mortaja o un hábito de mendicante, como era en realidad.
En fin, si queréis saber más sobre los secretos y misterios de esta obra de un genio, os dejo estos enlaces:
-http://maestrazgotemplario.blogspot.com.es/2014/10/el-secreto-del-conde-de-orgaz.html (aquí os cuenta algunos secretos del cuadro sobre autómatas y otros, y porqué el famoso niño estaba cetrino, secretos que no tienen desperdicio).

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